domingo, 22 de agosto de 2010

MALTRATO A LA MUJER

Actualmente está tristemente de moda el tema del maltrato a mujeres y esa "punta del iceberg" que son las estadísticas de muertes de mujeres a manos de su pareja. Sorprende comprobar con cuánta frecuencia saltan a las páginas de los periódicos los "nuevos casos" de agresión con resultado de muerte. Los análisis que se realizan de este "fenómeno" son a menudo simplistas y bien intencionados incluso cuando proceden de supuestos "expertos" en estos temas. Causas como la ocultación del problema a familiares, la falta de independencia económica, el bajo nivel sociocultural (no presente en muchos casos) y, por supuesto, la supuesta agresividad innata del varón llevan en sí mismos la puesta en marcha de políticas que tienden a mitigar estos aspectos como, por ejemplo, la necesidad de tutela a la mujer maltratada a través de proporcionarla vivienda y educación o formación suficiente para poder tener una vida independiente de su agresor

violencia intra-familiar

Entendemos que la violencia doméstica es un modelo de conductas aprendidas, coercitivas que involucran abuso físico o la amenaza de abuso físico. También puede incluir abuso psicológico repetido, ataque sexual, aislamiento social progresivo, castigo, intimidación y coerción económica.
Hay autores que señalan que la violencia Intrafamiliar se da básicamente por tres factores; uno de ellos es la falta de control de impulsos, la carencia afectiva y la incapacidad para resolver problemas adecuadamente; y además en algunas personas podrían aparecer variables de abuso de alcohol y drogas.



EL NIÑO Y LA NIÑA GOLPEADA

Todos sabemos que siempre es triste y doloroso arrastrar la vida cuando no se recibió amor, sobre todo de los padres durante la niñez. Todo el que ha estudiado siquiera un poco al ser humano, le va a decir que los cinco primeros años de la vida dejan una marca imborrable para toda la vida, para bien o para mal. Por eso, el privar a un niño de amor es como privar de fertilizante a un árbol que empieza a crecer, pero el golpearlo es como echarle veneno, lo va a terminar de matar psicológicamente y emocionalmente, o mejor va a crecer herido de muerte. Pero hay golpes y golpes, algunos golpes sacan sangre o dejan morados, incluso un mal golpe puede producir la muerte, pero hay otros mas sutiles que no se ven, pero que se graban a fuego lento no sólo en mente sino en la identidad de ese niño o de esa niña. Se graban en su "yo", y los frutos de estos golpes emocionales se van a ver después en sus relaciones con personas significativas y en su relación con el mundo.
Me gustaría hablar un poco más detalladamente de esos golpes, que solamente los ven o los oyen quienes los dan, aunque no piensen en las consecuencias futuras y terribles que van a traer en sus hijos.
Está claro, que cuando se repiten los golpes físicos, pero sobre todo los psicológicos o emocionales, se va agotando el amor. Nosotros los jovenes sabemos como duele el silencio, tal vez más que las palabras ofensivas. Ese silencio es el peor de los castigos, ahora imagínese a un niño que no ha hecho nada y no se le habla, y no se le abraza y acaricia, cómo se va conformando su identidad...pensemos en eso.

CONFLICTO ARMADO EN COLOMBIA

El conflicto armado colombiano es un conflicto armado interno que se desarrolla en Colombia desde principios de la década de los años 1960, que ha pasado por una serie de etapas de recrudecimiento, en especial cuando algunos sectores se comenzaron a financiar con el narcotráfico. El conflicto tiene antecedentes históricos en "La Violencia", conflicto bipartidista de la década de 1950 y de años anteriores que datan a la época colonial cuando Colombia, entonces la Nueva Granada, se independizó del régimen monárquico español. Sin embargo, la época en que se presentó un mayor recrudecimiento ocurrió entre 1988, cuando estaba en la presidencia Virgilio Barco y se rompieron los diálogos de paz con las guerrillas, hasta 2003, con el accionar del Estado, las guerrillas, grupos de narcotraficantes y paramilitares, durante el inicio de la presidencia de ALVARO URIBE VELES